quinta-feira, 6 de novembro de 2008

Carta a un tio, y a ti también


A ver. Hace tiempo desde que no te escribo. A lo mejor, ya no sé como escribirte. Si, eso es. Los días se pasan como noches sin dormir, las horas solamente desaparecen mientras intentamos vivir.

Pienso que es tarde, pero aún tenemos la esperanza, ¿no? ¿De qué? De salir por la calle, jugando a algo - la rayuela que está en el suelo, ¿por que no?

Porque ya no eres una niña, tonta. ¿Cuando comprenderás que en el mundo los que paran para nada - que en la realidad, es todo - se pierden en el otro mundo, y el real problema es que ése otro mundo es mil veces mejor (lo que hace más que difícil intentar volver al estado natural del mundo normal...)?

Eso es. Lo que nos falta. Ahora saldremos a bailar como si no hubiera problemas o imagínate que el vino aun no se ha terminado.

¡¿Que pasó con las luces de este cuarto?! Todas se parecen más oscuras... que hiciste, cabrón? ¿O fuiste tú, voluntad de dormir, que ha cerrado mis ojos?

Creo que una copa de café no seria mal. A lo mejor nos despertaría. No, pero no. No tenemos que usar cafeína para abrir nuestros ojos.

Tenemos que usarnos. Yo a ti y tú a mi. ¿Viste?

Ay, que no entiendes nada. A ver la actual crisis de que tanto nos decían. Si que estamos todos perdidos. ¿Pero que hacer? Paremos para pensar, algo que poco se hace actualmente.

Después de pensar, cantemos algo que alegre aquellos que ya no se sostienen por unas pocas notas.

Cantar, bailar y arriba y arriba, capitán.

Después vuelvo a escribirte, cuando el querer una horchata sea mayor que querer un zumo de graviola.

Mucho gusto a ti - persona que acaba de leer.

2 comentários:

Bruna Escaleira disse...

ay, carambas,

esta niña escribe como la noche en fiesta

una fiesta tranquila, pero tan viva!

algo raro ;)

Anônimo disse...

uy! que por primera vez escribiste en español!
y yo, tanto tiempo te dije que escribiera...
jooder, que me encantó!

bueno, hasta luego... v
uelvo cuando vea otro de estas geniales prosas poeticas de sudamerica.
un besito